Como toda empresa, el campo vale en función de la riqueza que es capaz de generar, pero con la desventaja de no estar protegido ante variables meteorológicas.
Las decisiones en los grandes negocios se toman detenidamente y con fundamentos para maximizar las oportunidades y no desperdiciar dinero. La incertidumbre con respecto a los cambios en el clima es un gran mal que todos los productores padecen, ya que un cambio brusco de temperatura no anticipada puede significar la diferencia entre una buena y una mala cosecha.
Por ejemplo, una diferencia de apenas pocos milímetros de precipitación puede determinar el comienzo, o no, de una siembra; la información correcta y oportuna puede definir un tratamiento preventivo y evitar el ingreso y propagación de una enfermedad en el lote; el cálculo de punto de rocío y un sistema de alertas marcan la diferencia entre implementar o no la lucha contra heladas en producciones intensivas; el dato real de humedad ambiente nos define el momento más adecuado de cosecha.
En cuanto al valor, la información que una estación puede brindarnos está traducida en el dinero que luego vamos a ganar con una cosecha exitosa y manejada. Y hablando de costos monetarios, es más costoso no tenerla.
Alta disponibilidad de la información, sálida, objetiva, específica, localizada y en tiempo real que permite identificar y contrastar mejoras en los procesos que revierten en ahorros, calidad, seguridad, beneficios ambientales, optimización de recursos, aumento de la productividad, mejora de la trazabilidad, etc.
En este sistema no es necesario instalar, mantener, actualizar o capacitar al personal.
Información centralizada que permite a todos los involucrados en la toma de decisiones (técnicos, productores, asesores, responsables) disponer de toda la información actualizada continuamente.
Múltiples servicios y aplicaciones en constante expansión.
Actualizaciones automáticas de la plataforma, y el usuario siempre dispone de la última versión de la plataforma sin coste adicional.
